27.9.13

Desierto.

Creo que el Gran Cañon y Monument Valley son los dos sitios más increíbles en los que he estado en toda mi vida. Es el lugar perfecto para sentirte más mierda de lo que ya eres. 





















25.9.13

Las Vegas.

Las Vegas es un timo, pero un timo digno de ver al menos una vez en la vida. El primer chasco te lo llevas con el cartel, de apenas cuatro metros de altura, situado en una mediana, con colas de gente para hacerse la foto y con una parte trasera que dice "Conduzca con cuidado". Joder, esto es Las Vegas, ¿no era todo muy loco aquí? Luego te das cuenta de que pese a lo enorme de la ciudad, lo "interesante" está en una calle, la Strip, que te la recorres en una hora (de noche, porque de día el calor del desierto te aplasta contra el suelo y tardarías horas en avanzar un par de metros). Y para acabar, un viernes a las 12 de la noche está todo el pescado vendido. Increíble pero cierto. Nosotros éramos los únicos borrachos a las 2 de la mañana paseando solos por medio de las avenidas únicamente acompañados de algunos mendigos, un par de negratas fumando cosas y una striper de unos 65 años volviendo a casa después de un duro día en la barra. Al menos gané 100 dólares en el Black Jack.

























22.9.13

Yosemite.

Quizás lo que menos me ha gustado. Y no porque no sea un sitio precioso, sino porque es un paisaje mucho más reconocible o familiar.